Tal vez nos encontramos familiarizados con la idea de que debemos tomar ocho vasos de agua al día, sin embargo, se nos hace difícil y olvidamos rápidamente esta recomendación, probablemente porque desconocemos su utilidad en el control del peso.
Sin embargo, muchas veces creemos que tenemos hambre, cuando en realidad tenemos sed. Si cada vez que queremos comer algo, nos preguntamos ¿cuánta agua he consumido hoy? Nos podemos dar cuenta que tal vez sea muy poca y que este deseo puede desaparecer o disminuir al simplemente tomar un vaso de agua.
En general se recomienda una ingesta de líquidos entre 1.5 a 2 litros por día, para que podamos hidratarnos de manera adecuada, es posible que si no estamos acostumbrados, en un comienzo debamos contabilizar su consumo. Al estar mejor hidratados, tendremos menor sensación de hambre y además nuestra piel, cabello y uñas se verán más sanos.
Debemos considerar que a mayor actividad física, más líquido deberíamos incorporar. Lo recomendable en una hora de ejercicio es tomar 1 lt. de agua, este deberá ser fraccionado en un poco previo al ejercicio y el restante post actividad. También se recomiendan en remplazo las bebidas isotónicas durante y post ejercicio, ya que estas bebidas contienen sales minerales y glucosa en concentraciones adecuadas.
Es importante vigilar el consumo de aquellos líquidos que tienen aporte energético y contabilizar la cantidad de puntos que vamos a ingerir.